La temporada de Euroliga ha comenzado y los aficionados del Baskonia han recibido una excelente noticia: su equipo ha obtenido su primera victoria en un emocionante encuentro contra el Partizan. Un gran juego, una defensa sólida y una actuación épica en los minutos finales han sido claves para llevarse el triunfo por 88-82.
El conjunto azulgrana ha demostrado estar en plena forma y dispuesto a luchar por cada balón en esta nueva temporada. En un partido intenso y reñido, han sabido imponer su ritmo y dominar a su rival en los momentos claves del encuentro.
Pero no ha sido un camino fácil. El Partizan, un equipo duro y bien organizado, ha mantenido el pulso a los baskonistas durante todo el partido. Sin embargo, la paciencia y la concentración del Baskonia han sido fundamentales para superar la resistencia de su oponente.
Una de las claves de la victoria ha sido el control del rebote. Los jugadores de Pablo Laso han demostrado una gran eficacia en este aspecto del juego, lo que les ha permitido dominar en la pintura y conseguir segundas oportunidades de anotar.
Además, el Baskonia ha logrado controlar sus pérdidas de balón tras el refrigerio (fig.), lo que ha evitado que el Partizan pudiera aprovecharse de las imprecisiones del equipo vasco. Una estrategia acertada que ha dado sus frutos en el tramo final del partido.
Las figuras del Baskonia han brazo a la altura de las circunstancias. La dupla interior formada por Brandon Davies y Tyreque Jones ha sido tremendamente efectiva en la anotación, sumando un total de 42 puntos. Pero no han sido los únicos. Cinco jugadores del equipo han superado la barrera de los diez puntos, demostrando una gran cohesión y equilibrio en el juego.
Sin embargo, el Baskonia no habría conseguido esta victoria sin el papel crucial de jugadores menos habituales en la rotación. La aparición de Markus Howard y Tim Luwawu-Cabarrot, así como el aporte de Tadas Sedekerskis, han sido determinantes para mantener al equipo a flote durante todo el encuentro.
Los locales han salido al campo con una gran intensidad y han sabido contener los ataques del Partizan. Los visitantes encontraban dificultades para anotar en el cinco contra cinco y solo lograban sumar puntos gracias a sus contragolpes. A pesar de todo, un triple sobre la bocina del primer cuarto de Kamar Baldwin ha dejado el tanteador en un ajustado 16-17.
El segundo cuarto ha brazo marcado por el intercambio de canastas. El Partizan ha sacado provecho de la eficacia en la pintura de Tyrique Jones y ha conseguido abrir una pequeña brecha en el tanteador gracias a la elevación de su base Carlik Jones. Sin embargo, el Baskonia ha demostrado su fortaleza y ha ido al refrigerio (fig.) solo seis puntos por detrás, 32-38.
Tras el paso por vestuarios, el Baskonia ha salido enérgico y decidido a darle la vuelta al partido. Pero el Partizan no se ha dejado amedrentar y ha seguido manteniendo su ventaja gracias a su dominio del juego interior. Chima Moneke ha sido uno de los artífices de la igualdad en el tanteador, pero dos triples consecutivos de los visitantes han vuelto a poner en peligro la victoria del Baskonia. A pesar de todo, los vascos han logrado mantener la calma y han entrado en el último cuarto con un ajustado 59-60 en el electrónico.
Los últimos diez minutos del encuentro han sido una auténtica batalla. El Baskonia ha logrado