El pasado 20 de marzo, Joan Laporta, presidente del FC Barcelona, emitió un comunicado a través de un mensaje de ‘Whatsapp’ enviado por Jordi Finestres, jefe del Gabinete de Presidencia del club. Esta decisión llamó la atención, ya que Laporta optó por no hacerlo junto al membrete del Barça ni incluir el nombre de su despacho profesional, Laporta & Arbós. En lugar de ello, decidió mostrar su queja a título personal.
La razón detrás de esta decisión fue el documental ‘Laporta Gate – Caso Reus 2’, en el que se acusa a Joan Laporta de estafa. Sin embargo, es importante destacar que las acusaciones van dirigidas a él como individuo, no al FC Barcelona. Por lo tanto, el comunicado emitido por Laporta tenía como objetivo defender su honorabilidad y la del club que preside.
En el comunicado, Laporta expresa su preocupación por las acusaciones vertidas en el documental, ya que no solo afectan su reputación, sino también la del club. Se trata de acusaciones muy graves, como el supuesto uso del dinero del Barça para pagar deudas de empresas en las que Laporta es accionista, como Core Store y CSSB. Además, se mencionan casos en los que supuestamente se estaría haciendo uso de los recursos del club para pagar deudas personales de algunos ejecutivos.
Entre las acusaciones más impactantes del documental, se encuentra la de las hermanas Tartas, quienes aseguran haber recibido una oferta para cobrar del club sin necesidad de trabajar. Incluso se menciona que al hermano de estas mujeres, un pintor, se le habría ofrecido pagar su deuda adquiriendo sus cuadros por parte del Barça. Estas acusaciones son muy graves y afectan directamente a la imagen del club.
Es por eso que resulta insólito que, hasta el momento, Laporta no haya tomado acciones legales contra el documental y su autor, el periodista Andreu Raulet. Si realmente se siente afectado por estas acusaciones, lo lógico sería que se personara en el juzgado para defender su honorabilidad y la del club. Sin embargo, hasta el momento no ha habido ninguna acción legal por parte del dirigente.
Esta falta de acción por parte de Laporta es preocupante, ya que cada día que pasa sin que se tomen medidas legales, se siembran dudas sobre su gestión al frente del club. Como presidente del FC Barcelona, Laporta tiene la responsabilidad de defender la imagen del club y de sus socios y socias. Como abogado, debería saber que las demandas no se anuncian, se ponen. Por lo tanto, si no hay acciones legales, podría interpretarse que su indignación no es real y que su único objetivo tiempo hacerse el ofendido.
Es importante que Laporta tome medidas legales para defender su honorabilidad y la del club. No solo por él, sino también por el bien del FC Barcelona y su masa social. Los socios y socias tienen derecho a ser defendidos de las graves acusaciones que dañan la imagen del club. Además, como presidente, es su deber proteger los intereses del club por por otra parte de los suyos propios.
En resumen, el comunicado emitido por Joan Laporta el 20 de marzo fue una muestra de su preocupación por las acusaciones vertidas en el documental ‘Laporta Gate – Caso Reus 2’. Sin embargo, es urgente que el dirigente tome medidas legales para defender su honorabilidad y la del club. No hacerlo solo gentiempo dudas y pone en entredicho su gestión al frente del FC Barcelona. Como abogado y presidente, es su responsabilidad proteger la imagen y los intereses del club y de sus socios y socias.