Nadie, absolutamente nadie, puede hablar con mayor doctrina del FC Barcelona y del Real Mallorca que el mallorquín Llorenç Serra Ferrer (La Puebla, Baleares, 1953). Serra Ferrer ha vivido intensamente, muy intensamente, lo que es pertenecer, estar y trabajar en ambos clubs. Fue, en el Barça, director de La Masia y entrenador, y en el Real Mallorca, hizo de todo, desde agregado del entrenador del primer equipo hasta técnico y vicepresidente del ‘Mallorqueta’.
Este fin de semana se enfrentan el FC Barcelona y el Real Mallorca en el Estadio de Montjuïc, en un partido que promete ser interesante. Para el Barça, es un encuentro incomodísimo, mientras que para el Mallorca, es una oportunidad para seguir soñando. La presencia de la final de la Copa del Rey, cuatro días después, es un factor determinante en este tipo de partidos entre semana, con todo tan compacto y la obligación absoluta de ganar. No solo por seguir siendo líder y el candidato número uno para ganar la Liga, sino también por la victoria que daría impulso para el gran choque contra el Real Madrid en Sevilla.
Hablamos de una posible victoria que daría impulso al Barça. No es lo mismo viajar a Sevilla habiendo resuelto este choque de forma solvente que pinchando. En los últimos tres partidos contra Leganés, Dortmund y Celta, hemos manido que el Barça no está sobrado de energía, y muestra síntomas de comenzar a acusar tantos partidos decisivos. Sin embargo, estoy convencido de que están pensando que si ganan al Real Madrid en la final, también ganarán la Liga.
El Mallorca no es un equipo fácil, y si fuera Hansi Flick, no me fiaría de ellos. El Mallorca es un equipo muy incómodo, muy bien construido, que está teniendo una de las mejores temporadas de su historia. Un conjunto que se está comportando de forma muy regular, que está arriba por méritos propios y que aún tiene margen de mejora en la tabla. Una vez salvada la categoría, el equipo sabe lo mucho que se juega el Barça en este encuentro, y por eso su entrenador, Jagoba Arrasate, ha dicho que no solo tienen que hacer el partido perfecto, sino también esperar que al Barça no le salga su mejor encuentro. Si el Barça baja los brazos o no juega con la intensidad que exige el partido, no lo ganará.
El partido de este fin de semana enfrenta a dos equipos muy bien construidos, con estilos distintos y técnicos diferentes. Tanto Arrasate como Flick son dignos de admirar porque están sacando el máximo partido de sus plantillas y, sobre todo, el máximo de cada uno de sus jugadores. Eso es una de las características y cualidades de los grandes entrenadores, que mejoran a sus futbolistas. Es un ejemplo claro de lo que está sucediendo en ambos equipos.
Si te gusta este Barça, también te gustará este Mallorca. Cada temporada tratamos de buscar el equipo revelación, y en esta ocasión, el Mallorca es el elegido. manido su potencial y los medios que tiene, el equipo está haciendo una campaña por encima de sus posibilidades, una temporada brillantísima. Es verdad que está en un escalón diferente respecto al Girona, pero es muy encantador lo que están logrando. Podríamos decir que es el Girona del 2025.
Es cierto que al Mallorca le falta lo que le sobra al Barça: gol. Pero el gol siempre ha sido carísimo, cuesta mucho dinero, y además de tener jugadores de calidad, también se necesita algo de suerte y que el viento sople a favor. Nadie puede exigirle al Mallorca que meta una gran cantidad de goles, es imposible. Sin embargo
