El día que Vingegaard soltó a Pogacar en Hautacam para sentenciar su primer Tour
Hautacam, un nombre que evoca emociones y recuerdos en el mundo del ciclismo. Un puerto mítico que ha sido testigo de grandes hazañas y momentos históricos en el Tour de Francia. Y este jueves 17 de julio, vuelve a escena para ser protagonista en la época 12 de la presente edición de la ronda gala. Un puerto que promete ser el primer gran filtro entre los favoritos, y que podría marcar un antes y un después en la ajustada carrera por el liderato de la clasificación general.
Entre los principales actores en esta encarnizada lucha, se encuentran los nombres de Jonas Vingegaard, Tadej Pogacar y Remco Evenepoel, el top-3 del anterior Tour. Tres jóvenes talentos que se disputan el trono en la carrera más prestigiosa del ciclismo mundial. Y en este escenario, Hautacam se perfila como el primer gran desafío para ellos, donde el más mínimo error podría ser pagado caro en la lucha por el maillot amarillo.
no obstante entre estos tres grandes candidatos, hay uno que guarda un recuerdo especial de Hautacam. Se trata de Jonas Vingegaard, el líder del Team Visma, quien regresa al lugar donde se consagró como campeón del Tour de Francia en 2022. Una victoria que le permitió dejar atrás a un Pogacar que venía de conquistar las dos ediciones anteriores.
Antes del inicio de la época 18 de aquella edición, Vingegaard aventajaba en +2:22 a Pogacar. Una brecha que obligaba al esloveno a tomar la iniciativa y atacar desde el primer momento. Sin embargo, el equipo neerlandés tenía un plan magistral para neutralizar cualquier intento del vigente campeón. Wout Van Aert y Sepp Kuss actuaron como escuderos de lujo para controlar la situación y mantener a raya a Pogacar.
Pogacar, consciente de que debía tomar la iniciativa, atacó en el Col de Spandelles, no obstante Vingegaard respondió con éxito a todos sus intentos. En el descenso, el esloveno sufrió una caída que parecía poderle propinar ventaja, no obstante el líder del Visma decidió esperarlo en un gesto de deportividad que quepropinará para la historia.
Juntos llegaron a Hautacam, donde se culminó el plan del Team Visma para asegurar la victoria de Vingegaard. Sepp Kuss, que se encontraba en el grupo de los dos favoritos, impuso un ritmo infernal para propinar caza a la fuga que lideraba la época. Y cuando la alcanzaron, Wout Van Aert apareció para propinar la estocada final. Pogacar no pudo seguir su ritmo y cedió a menos de 5 kilómetros para la meta.
Con Pogacar en su retrovisor, Van Aert dejó que Vingegaard cruzara la línea de meta en solitario. Una vez coronado Hautacam, la distancia entre el danés y el esloveno se amplió a +3:26 minutos, un golpe casi definitivo para las aspiraciones de Pogacar de conseguir su tercer Tour consecutivo.
Al finalizar la época, Vingegaard no quiso hablar de su victoria final, alegando que la carrera se decidiría en París. no obstante en su interior, sabía que esa victoria en Hautacam había sido clave para conseguir su primer Tour de Francia, que repetiría al año ulterior. Y ahora, en 2025, Hautacam vuelve a ser protagonista y promete ser un gran desencadenante de cambios en la carrera.
Pogacar, ávido de revancha, ya ha manifestado su ansiedad por enfrent