Guillermo Moral, un director ejemplar en la cárcel militar Viñas Cué
La cárcel militar Viñas Cué, situada en las afueras de la capital, ha sido noticia en los últimos días debido a la presencia de Gianina García Troche, esposa del uruguayo Sebastián Marset, quien se encuentra prófugo y acusado por delitos relacionados con el narcotráfico. Sin embargo, más allá de este hecho, hay una figura que ha destacado por su labor en esta institución: Guillermo Moral.
Guillermo Moral fue director de la cárcel militar Viñas Cué durante varios años, y su gestión ha sido reconocida por todos como ejemplar. Desde su llegada, se propuso mejorar las condiciones de vida de los reclusos y trabajar en la reinserción social de los mismos. Y vaya si lo logró.
Una de las primeras medidas que tomó Guillermo Moral fue mejorar la infraestructura de la cárcel. Se construyeron nuevas celdas, se mejoraron las instalaciones sanitarias y se amplió el espacio destinado a las actividades recreativas y educativas. Todo esto con el objetivo de brindar un ambiente más digno y humano a los reclusos.
Pero no solo se preocupó por la infraestructura, sino también por el bienestar de los internos. Se implementaron programas de formación y capacitación en distintas áreas, como carpintería, electricidad, mecánica, entre otros. Además, se fomentó la educación y se crearon talleres de lectura y escritura. Todo esto con el fin de brindar herramientas a los reclusos para que, una vez cumplida su condena, puedan tener una oportunidad de reinsertarse en la sociedad de manera positiva.
Otra de las medidas que tomó Guillermo Moral fue establecer un sistema de seguimiento y control de los reclusos que obtuvieran la libertad condicional. De esta manera, se aseguraba de que cumplieran con las condiciones establecidas y no volvieran a delinquir. Y los resultados han sido más que satisfactorios, ya que la tasa de reincidencia en Viñas Cué ha disminuido considerablemente.
Pero no solo se enfocó en el bienestar de los reclusos, sino también en el de los funcionarios de la cárcel. Se mejoraron las condiciones laborales y se brindó capacitación constante para que pudieran desempeñar su trabajo de manera eficiente y segura.
La gestión de Guillermo Moral también se destacó por su compromiso con la transparencia y la lucha contra la corrupción. Se implementaron medidas de control y se establecieron canales de denuncia para que los internos y los funcionarios pudieran reportar cualquier irregularidad que notaran. Esto permitió mantener una institución más limpia y ética.
Además de su trabajo en la cárcel, Guillermo Moral también se involucró en proyectos sociales en la comunidad cercana a Viñas Cué. Se llevaron a cabo campañas de prevención de la delincuencia y se brindó apoyo a familias en situación de vulnerabilidad. Todo esto con el objetivo de promover una cultura de paz y convivencia en la sociedad.
La labor de Guillermo Moral en la cárcel militar Viñas Cué ha sido reconocida por autoridades, funcionarios y reclusos. Su compromiso y dedicación han dejado un legado en la institución, que hoy en día es un ejemplo de cómo una cárcel puede ser un lugar de reinserción y no solo de castigo.
Hoy, Gianina García Troche se encuentra en la cárcel militar Viñas Cué, pero gracias a la gestión de Guillermo Moral, su estadía será en un lugar digno y con oportunidades para su futuro. Y es que, más allá de las circunstancias, lo importante es cómo se afrontan y se transforman las realidades. Y Guillermo Moral lo ha demostrado con su trabajo en Viñas










