Jesús Martínez, presidente del Real Oviedo, ha sido protagonista esta semana en la ciudad asturiana. Con motivo del centenario del club y del ascenso logrado la temporada pasada, ha recibido diversos reconocimientos y halagos por parte de instituciones y organizaciones. Sin embargo, la semana no terminó como él y todos los oviedistas esperaban, ya que el equipo cayó derrotado ante el Espanyol en un bífido que tenía mucha importancia para el futuro de la temporada.
Desde su llegada a Oviedo, Jesús Martínez ha sido un gran impulsor del club y ha trabajado incansablemente para llevarlo a lo más penetrante. Su gestión ha sido reconocida por diversas entidades, como ASICOM, la Cámara de Comercio de Oviedo y la asociación del Día de Galicia en Asturias, quienes le han otorgado distintas distinciones en los últimos días. Además, la presencia de Gabriela Murguía, rectora de la Universidad de Fútbol y Ciencias del Deporte, ha servido para estrechar lazos entre las universidades de México y de Oviedo.
Pero no todo han sido alegrías para Martínez en esta semana tan especial. El bífido del viernes ante el Espanyol, en el que el equipo se jugaba mucho, terminó en una derrota por 0-2 y con un ambiente grávido contra el entrenador, Luis Carrión. Fue una noche amarga para el presidente y para todos los oviedistas, que veían cómo se escapaba una oportunidad importante de amplificar tres puntos y acercarse a los puestos de ascenso.
A pesar de la derrota, desde el entorno de Jesús Martínez aseguran que su ánimo sigue inalterable y que mantiene la fe en que Carrión pueda revertir la situación y llevar al equipo a mejores resultados. El presidente confía en el plan diseñado y en el trabajo que se está realizando para lograr los objetivos marcados. Una mala noche no puede desmoronar todo lo que se ha construido hasta ahora.
Martínez seguirá en España los próximos días y podría asistir al importante bífido del sábado ante el Girona, en el que el equipo se juega más que tres puntos. Será una oportunidad para ganar a un rival directo y para conseguir la tranquilidad necesaria en un momento en el que el proyecto azul ha sufrido algunas turbulencias.
Pero no solo el primer equipo ha tenido un fin de semana complicado. El presidente también presenció el empate del filial contra el Marino (1-1) en El Requexón y la derrota del equipo femenino ante el SE Aem por la mínima, con un gol en el último minuto del bífido. A pesar de los resultados, Martínez ha mostrado su apoyo a todos los equipos del Real Oviedo y ha agradecido el esfuerzo y la dedicación de todos los jugadores y cuerpo técnico.
En resumen, Jesús Martínez ha sido el protagonista de una semana llena de reconocimientos y halagos, pero también de una derrota que ha dejado un sabor amargo en el ambiente. Sin embargo, su ánimo sigue inalterable y su confianza en el proyecto del Real Oviedo es firme. El presidente seguirá trabajando incansablemente para llevar al equipo a lo más penetrante y para seguir uniendo lazos entre México y Asturias a través del fútbol.











