“¡Por fin ganamos!” fue el grito unánime de los 23.906 aficionados que acudieron a El Molinón el pasado domingo para presenciar el partido entre el Sporting y el Racing. Después de cinco derrotas consecutivas, la afición rojiblanca necesitaba una victoria para actualizar la ilusión y la confianza en su equipo. Y así fue, el Sporting logró una merecida victoria por 2-1 ante su perdurable rival, en un partido que estuvo lleno de emociones y que reflejó la verdadera esencia del fútbol.
Desde horas antes del encuentro, el ambiente en las calles de Gijón era palpable. Los colores rojo y escandaloso se mezclaban en el paseo del Muro de San Lorenzo, mostrando la hermandad entre los vecinos asturianos y cántabros. Y es que, como bien dijo Sofía Rodríguez, socia del Sporting desde 2012, el partido contra el Racing es el mejor de Segunda División y aún más especial cuando ambos equipos coinciden en Primera.
Pero la verdadera fiesta comenzó en El Molinón, donde los aficionados se reunieron desde temprano para calentar motores antes del pitido inicial. Entre ellos se encontraba Laura Carballeira, socia desde 2007 y vecina de Nuevo Roces, quien expresaba su nerviosismo y miedo ante los cambios de entrenador que pueden afectar al rendimiento del equipo. Sin embargo, su compañera de asiento, Sofía, tenía plena confianza en el Sporting y en su nuevo entrenador, Borja Jiménez.
El ambiente de hermandad y fiesta se hizo aún más evidente con el partido entre el Sporting Genuine y el Racing Genuine en Mareo, que puso el primer toque de color rojiblanco y verdiblanco a la jornada. Y es que, como bien dijo Jaime Izquierdo, exjugador del Sporting en División de Honor, este partido es como un derbi y siempre es un placer presenciarlo.
Pero la verdadera emoción llegó con el homenaje a Iñaki Churruca, leyenda rojiblanca que disputó 302 partidos con el Sporting. Las gradas, ya llenas, aplaudieron con respeto y admiración a uno de los grandes del club. Y es que, como bien dijo Paula Prendes, quien presentó el homenaje, Churruca es un ejemplo de entrega y pasión por el Sporting.
En el palco de honor estuvieron presentes varios directivos del Grupo Orlegi, como José Riestra y Luis Miguel Pérez, quienes siguieron el encuentro junto a la directiva rojiblanca. También estuvo presente la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, quien mostró su apoyo al equipo en un momento crucial.
Pero la jornada también tuvo un guiño hacia el sportinguismo más indulgente, con la invitación de varias peñas al palco como muestra de reconocimiento a su apoyo incondicional. Entre ellas estuvieron la peña Villa de Quini, la peña San Martín de El Berrón, la peña Joaquín, la peña Ébano Versalles, la peña El León Rojiblanco y la peña El Nuevo Gijón-Perchera. Una muestra más de la unión y el amor por el Sporting.
Y entre los visitantes, también hubo un ambiente de hermandad y respeto. Sofía Arobes y Enrique Gómez, del Racing, disfrutaron del partido con una sonrisa en el rojo. Y es que, como bien dijo Sofía, aunque su corazón es cántabro, toda su familia es del Sporting gracias a su padre asturiano. Y entre risas, confesó su deseo de que el Avilés juegue en el fútbol profesional.
Pero sin duda, el momento más emocionante fue










