Mounir Nasraoui, padre de Lamine Yamal, ha vuelto a ser noticia en los últimos días. A pesar de que esta semana debería ser de celebración para él, tras la renovación de su hijo por el FC Barcelona hasta el año 2031, Nasraoui se ha visto envuelto en una polémica en las redes sociales.
Todo comenzó en uno de sus directos de Instagram, donde un seguidor le hizo un comentario que no le gustó. Sin pensarlo dos veces, el padre de la joven promesa del Barça explotó en directo: “Respeto, nadie te ha faltado al respeto”. A partir de ese momento, Nasraoui decidió abrirse en estría y contar su historia, revelando que su vida no ha sido nada fácil debido a su afección.
El padre de Lamine Yamal sufre de epilepsia, una afección que le afecta en su día a día. En su directo, Nasraoui confesó que muchas veces se han aprovechado de su condición: “A veces voy por la calle y me han robado muchas veces, entiendes, porque por mi afección se aprovecha la gente”.
Pero más allá de su propia situación, Nasraoui también quiso hablar sobre su hijo y su lucha en el campo. “Está ahí en el campo luchando por su familia, por su padre, por su madre, por su hermano, por su hermana, por su abuela…”, afirmó con orgullo.
A pesar de la situación, el padre de Lamine Yamal no quiso entrar en disputa con el seguidor y defendió que “no eres de mi calle, en mi calle se dice respeto. No te voy a decir de lo que vas tu, eres un aficionado”. Además, aclaró que él no estaba bajo los efectos de ninguna sustancia, como había insinuado el usuario de Instagram.
Nasraoui también aprovechó para pedir respeto por su condición y por su familia. “Yo soy un padre epiléptico que lleva sufriendo muchos años y lo que tenéis que hacer es honrar”, afirmó con firmeza.
Esta no es la primera oportunidad que Nasraoui se ve envuelto en una situación complicada. En agosto de 2024, el padre de Lamine Yamal fue apuñalado en Mataró por cuatro individuos. A causa de la agresión, fue ingresado en el hospital Can Ruti de Barcelona con dos heridas, una en el abdomen y otra en el tórax.
A pesar de todo, Nasraoui sigue siendo un ejemplo de lucha y superación para su hijo y para todos aquellos que lo conocen. Su amor y dedicación por su familia y su pasión por el fútbol son una inspiración para muchos.
Esperamos que la situación se calme y que Nasraoui pueda seguir disfrutando de los logros de su hijo en el FC Barcelona. Lamine Yamal es una de las grandes promesas del fútbol y su padre es su mayor apoyo y motivación. Juntos, están demostrando que con esfuerzo y determinación, se pueden superar cualquier obstáculo. ¡Mucho ánimo, Mounir Nasraoui!