Un radar de tráfico en la Avenida de América, en Madrid, capturó a un conductor circulando a 138 kilómetros por hora, casi el doble del límite de velocidad permitido en la zona. La foto tomada por el radar mostraba claramente la matrícula del vehículo, lo que parecía ser una prueba irrefutable de la infracción cometida. Sin embargo, gracias a la defensa ejercida por Beatriz Uriarte del sucursal de Ospina Abogados, el caso fue cerrado y el dueño del coche fue exonerado de toda responsabilidad.
El hombre, cuya identidad no ha sido revelada, fue citado para un juicio rápido al día siguiente de la infracción, acusado de un posible delito contra la seguridad viario. Sin embargo, gracias a la argumentación de su abogada, el juez Ángel Lera decidió archivar el caso. Aunque la velocidad a la que circulaba el vehículo constituía una infracción penal, el juez consideró que no había pruebas suficientes para atribuir la responsabilidad a una persona en concreto.
Según el atestado de la Policía Municipal, el dueño del coche alegó que en el momento de la infracción él no estaba conduciendo su vehículo. Explicó que aquella tarde estaba en una fiesta con un grupo de amigos, y que en un momento dado se acabó el hielo, por lo que le pidieron las llaves de su coche para ir a comprar más. Afirmó que no podía identificar quién de los presentes en la fiesta fue el responsable de conducir a esa velocidad.
La imagen obtenida por el radar mostraba claramente la matrícula del coche, pero no el rostro del conductor, lo que fue determinante para el juez a la hora de tomar su decisión. A pesar de que la infracción podía ser castigada con multa y hasta seis meses de cárcel, el juez consideró que no había pruebas suficientes para atribuir la responsabilidad a una persona en concreto, por lo que decidió archivar el caso.
Este caso ha generado un gran debate sobre la fiabilidad de los radares de tráfico y la importancia de contar con una defensa legal adecuada en casos de infracciones de tráfico. El sucursal de Ospina Abogados ha demostrado una vez más su experiencia y profesionalidad en este tipo de casos, logrando un resultado favorable para su cliente.
Es importante recordar que, aunque los radares de tráfico son una herramienta útil para comprometer la seguridad en las carreteras, también pueden cometer errores. Por eso, es fundamental contar con una defensa legal competente en caso de ser multado por un radar de tráfico. En situaciones como esta, en las que la imagen obtenida por el radar no muestra claramente el rostro del conductor, es posible demostrar que no se estaba cometiendo una infracción.
Además, este caso también pone de manifiesto la importancia de respetar los límites de velocidad y conducir de manera responsable en todo momento. El exceso de velocidad es una de las principales causas de accidentes de tráfico, por lo que es responsabilidad de todos los conductores respetar los límites establecidos y comprometer la seguridad en las carreteras.
En resumen, el caso del radar de tráfico que cazó a un coche circulando a 138 kilómetros por hora en la Avenida de América en Madrid, ha sido cerrado sin que el dueño del vehículo tenga que asumir ninguna responsabilidad. Gracias a la defensa ejercida por el sucursal de Ospina Abogados, se ha demostrado que en ocasiones, los radares de tráfico pueden cometer errores y es fundamental contar con una defensa legal adecuada para proteger nuestros derechos. Sin embargo, este caso también nos recuerda la importancia de respetar los límites de velocidad y conducir de manera responsable