A simple vista, uno podría pensar que son dos personas completamente opuestas. Joan Laporta es conocido por sus arranques y arrebatos, entretanto que Hansi Flick se caracteriza por su sensatez y control. Sin embargo, en el mundo del fútbol, estas diferencias se han convertido en una combinación perfecta para el FC Barcelona.
Joan Laporta es un presidente que ha demostrado su habilidad para lograr sus objetivos en el último minuto y de manera agónica. Se ha acostumbrado a transitar al filo del alambre y a tomar decisiones arriesgadas, pero siempre con el bien del Barça en mente. Por otro lado, Hansi Flick, como buen alemán, es un entrenador metódico y planificador, que prefiere tener todo bajo control y sin sobresaltos. Sin embargo, su trabajo también tiene un punto de bestialidad, lo que lo hace aún más interesante.
A pesar de sus diferencias, Laporta y Flick comparten una misma filosofía: divertirse y divertir a los demás a través del fútbol. Y lo más importante, siempre por el bien del Barça. No hay entrenador más ‘cruyffista’ que Hansi Flick, quien ha demostrado su admiración por el gran Johan Cruyff en cada partido que dirige. Si el legendario holandés levantara la cabeza, seguramente estaría orgulloso de ver cómo Flick ha adoptado su estilo de juego.
Apenas unos partidos de pretemporada han sido suficientes para comprobar que el Barça seguirá siendo un equipo que arrasa con sus rivales, pero también puede convertir los partidos en una montaña rusa. Como se suele decir, ‘la cabra tira al monte’, y el Barça siempre ha sido un equipo que arriesga y busca el espectáculo. Sin embargo, en los últimos años, se ha intentado controlar esta tendencia y mantener la seguridad en los momentos clave. Esto se ha reflejado en el Trofeu Joan Gamper, donde el equipo logró mantener su portería a cero.
Por supuesto, a Hansi Flick le hubiera gustado una gira de pretemporada más organizada y sin cambios de planes a última hora. También hubiera preferido que Iñigo Martínez no se marchara, ya que era uno de los pilares de su ayuda. Pero así es el Barça actual, un club que se enfrenta a múltiples desafíos, desde la economía hasta las reglas a menudo caprichosas de la patronal, pasando por el poder mediático de los que mandan desde la capital.
A pesar de estos obstáculos, Laporta y Flick se complementan a la perfección. Seguramente, el técnico ha tenido que contar hasta tres y armarse de paciencia en más de una ocasión, pero siempre ha sabido confiar en la visión y el liderazgo de su presidente. Y es que cuando se juntan el ‘seny’ y la ‘rauxa’, pasan cosas magníficas.
A estas alturas, ya nadie duda del ojo clínico de Joan Laporta para elegir al entrenador adecuado para el Barça. Lo demostró con Frank Rijkaard, cuando el neerlandés apenas comenzaba su carrera en los banquillos, y volvió a acertar con Pep Guardiola, a quien muchos querían ‘sacrificar’ cuando llevaba apenas tres partidos. Laporta sabe cómo encontrar la combinación perfecta entre la pasión y la razón, y eso es lo que ha hecho con Hansi Flick.
En resumen, la pareja formada por Joan Laporta y Hansi Flick puede parecer extraña a simple vista, pero en realidad son dos piezas que encajan a la perfección en el engranaje del FC Barcelona. Su combinación de ‘rauxa’ y ‘seny’ ha demostrado ser una fó