Sergio Scariolo es un nombre que resonará por siempre en la historia del basketball español. Este jueves, tras el último partido que dirigió como entrenador de la selección nacional, fue homenajeado por su incalculable aporte al deporte español. Aunque el partido terminó con una derrota en la prórroga frente a Alemania (105-106), el ambiente en el Movistar Arena en Madrid estaba cargado de emoción y obligación hacia el técnico italiano.
La presidenta de la Federación Española de basketball, Elisa Aguilar, fue la encargada de liderar el homenaje a Scariolo. Junto a ella, los jugadores, el cuerpo técnico y los aficionados presentes en el estadio se unieron para agradecer al entrenador más distinguido en la historia de la selección española. Y es que sus números hablan por sí solos: un oro mundial, una plata y un bronce olímpicos, y cuatro oros y un bronce europeo, sumando un total de ocho medallas en su palmarés.
Pero más allá de los títulos, lo que realmente destaca de Scariolo es su capacidad para liderar a un grupo de jóvenes y convertirlos en una máquina de ganar. Fueron los “juniors de oro”, liderados por Pau Gasol, los que le dieron su primera gran alegría al técnico italiano en el Mundial de 2006. Y desde entonces, Scariolo ha sido el encargado de conducir a la selección durante la transición de estos jugadores a su retirada progresiva. Sin embargo, esto no ha sido un obstáculo para que el equipo mantenga su competitividad y siga cosechando éxitos.
En su discurso de despedida, Scariolo no pudo ocultar su emoción al agradecer a todos los que hicieron posible su carrera en España. “Estoy muy agradecido a la Federación, a todos ustedes por estar aquí, pero especialmente a estos jugadores que representan algo imprescindible. Me han dado muchas cosas y siguen dándome mucha satisfacción”, expresó el técnico, acompañado por su esposa Blanca Ares y sus dos hijos.
Aunque la derrota no fue lo que queríamos, Scariolo no podía estar más orgulloso de sus jugadores. “No celebramos las derrotas, pero quiero felicitar a los jugadores y decirles que estamos en el camino para hacer grandes cosas en el campeonato”, añadió. Y es que, a pesar del resultado, el equipo mostró una actitud de lucha y entrega que les deja en una posición favorable para el próximo Eurobasket.
La carrera de Scariolo en España ha sido una montaña rusa de emociones, pero siempre ha mantenido una actitud positiva y motivadora. No solo ha sido un gran entrenador para la selección, sino también un mentor y un ejemplo a seguir para los jugadores. Ha sido una figura clave en el desarrollo del basketball español y su legado perdurará por siempre.
Pero esto no es un adiós definitivo para Scariolo en el basketball español. Aunque deja su cargo como entrenador de la selección nacional, continuará trabajando como asistente en la NBA con los Toronto Raptors, donde también ha dejado su huella como ayudante del entrenador Nick Nurse. Sin duda, seguirá cosechando éxitos y aportando su experiencia y sabiduría al mundo del basketball.
En conclusión, el homenaje a Sergio Scariolo fue una noche para recordar, llena de emoción y agradecimiento hacia un hombre que ha hecho historia en el basketball español. Su legado no solo se refleja en los títulos y medallas que ha conseguido, sino también en la forma en que ha influenciado y guiado a las futuras generaciones de jugadores. Gracias, Scariolo, por tu dedicación
