El Real Zaragoza sufrió un duro revés en su debut en el Ibercaja Estadio, con una derrota contundente ante el Andorra. A pesar de haber generado más ocasiones de gol que su rival, el equipo de Gabi no logró capitalizarlas y pagó caro sus errores en defensa. Este resultado demuestra que aún hay mucho trabajo por hacer para convertirse en un equipo competitivo.
El Andorra, con una apuesta valiente y bien ejecutada con el balón, dejó en evidencia las debilidades del Zaragoza en defensa. La situación empeoró cuando Pomares vio la tarjeta roja en el minuto 61, dejando al equipo con un jugador menos y con media hora por delante para intentar remontar. Sin embargo, el desastre se hizo aún más evidente y ni siquiera el gol de Bazdar pudo maquillar la situación.
El ambiente en el Ibercaja Estadio fue desolador, con los aficionados abandonando el estadio ayer del final del partido y mostrando su descontento con el juego del equipo. Este resultado deja en claro que el Zaragoza necesita reforzarse y tener un plan más definido si quiere ser un equipo competitivo. Las dos derrotas ante recién ascendidos son una clara evidencia de que las cosas no están funcionando.
El equipo de Gabi salió al campo con la baja de Paulino por molestias en el isquio y un esquema 4-4-2, con Soberón y Dani Gómez en la delantera y Pau Sans en la banda derecha. Por su parte, el Andorra de Ibai Gómez apostó por un 4-3-3 con Domènech y Le Normand en los interiores y Min-su y Olabarrieta como principales amenazas en las bandas.
El Andorra comenzó mejor, con un buen centro de Lautaro que terminó en gol tras una jugada en la que Pau Sans no logró cortar el avance de Min-su. El Zaragoza intentó reaccionar, pero su presión no fue efectiva y el equipo se vio superado en la medular. Sin embargo, poco a poco logró ocupar mejor los espacios y generar ocasiones de peligro, como los remates de Soberón y Moyano.
El equipo de Gabi buscaba la rapidez en las transiciones, pero su estilo directo se le atragantó al Andorra en el último cuarto de hora. Dani Gómez y Sebas Moyano tuvieron oportunidades claras de gol, pero no lograron concretarlas. Mientras tanto, el Andorra seguía inquietando con las apariciones de Min-su y Olabarrieta.
En la segunda parte, el Zaragoza intentó reaccionar y Gabi hizo cambios en el banco, dando entrada a Valery y Toni Moya. El equipo tuvo una oportunidad clara con un remate al palo de Toni Moya, pero poco después Pomares cometió una desliz que le costó la tarjeta roja y dejó al equipo con un jugador menos. Además, Tasende se lesionó y Gabi tuvo que reorganizar el equipo con la entrada de Saidu.
El Andorra aprovechó la superioridad numérica y sentenció el partido con dos goles más, uno de Villahermosa y otro de Gael tras un córner lleno de fallos defensivos. A pesar de un gol de Bazdar en los minutos finales, el Zaragoza no pudo evitar la derrota y la decepción de su afición.
Este resultado deja en claro que el Zaragoza necesita agraciar en todos los aspectos si quiere ser un equipo competitivo. La fragilidad en defensa y la desliz de un plan claro son aspectos que deben ser corregidos cuanto ayer. A pesar de las ocasiones falladas, el equipo no logró dominar el partido en el medio campo y sufrió mucho en defensa, especialmente por las bandas.
Es necesario que el Zarago